Conectados a cañerías de agua a presión, los rociadores automáticos, también llamados sprinklers son uno de los sistemas de protección contra incendios más completos, puesto que desempeñan hasta 3 funciones de modo simultáneo: detección, alarma y extinción de incendios.
Y es que cuando hablamos de incendios, hay sistemas que son más eficaces que otros. Por ejemplo, el uso de los extintores está más extendido en España, aunque es una medida bastante eficiente, requiere que, ante un incendio, una persona vaya hasta él y lo active para mitigar las llamas. En cambio, los rociadores automáticos contra incendios son mucho más efectivos, dado que se activan de manera automática y abarcan superficies más amplias.
Rociadores contra incendios: tasas de mortalidad más bajas
En estudios recientes se llevó a cabo una comparativa entre viviendas con diferentes sistemas contra incendios. La tasa de mortalidad por cada 1.000 habitantes mostró datos concluyentes:
- 18 % más baja en viviendas con detectores de humo, pero sin rociadores automáticos.
- 62 % más baja en hogares con sistemas de detectores de humo conectados a una central de alarma.
- 88 % más baja en inmuebles con sistema de detección y sistema de rociadores automáticos.
- 90 % más bajo en viviendas con rociadores y detectores de humo conectados.
¿Cómo funcionan los rociadores contra incendios?
Los rociadores automáticos llevan incorporados unas cabezas rociadoras o válvulas que se activan a una temperatura establecida previamente, dejando salir agua en grandes áreas para extinguir el fuego. El agua o agente extintor corre por un sistema de cañerías hasta las válvulas, que se abren automáticamente a una temperatura específica.
La apertura automática de estas válvulas se produce mediante un líquido que, cuando las temperaturas son elevadas, comienza a hervir y rompe una tapadera para que el agua salga y apague el fuego.
Ventajas que brindan los rociadores automáticos contra incendios
Considerados como una de las medidas contra incendios más eficientes, a continuación señalamos las principales ventajas que ofrecen los rociadores automáticos contra incendios:
- Rápida respuesta: gracias a su mecanismo de disparo de agua automático, la respuesta de este sistema es inminente ante cualquier conato de incendio.
- Coste asequible: el coste por cada metro cuadrado en viviendas y residencias no es elevado. Además, se espera que el coste se reduzca a medida que aumente la demanda.
- Pequeño tamaño y estética integrada: los rociadores automáticos se pueden instalar de modo discreto y se pueden integrar estéticamente con la decoración del inmueble.
- Requerimientos mínimos de agua: Por lo general, un sistema de rociadores se puede vincular con el suministro de agua principal de una vivienda.
- Activación individual: esto significa que si el fuego se produce, por ejemplo, en la cocina, solo se activará el rociador más próximo al fuego
En definitiva, los sistemas de rociadores contra incendios son una alternativa eficiente, económica, discreta y de bajo mantenimiento, de ahí que existan campañas de concienciación acerca de la importancia de su instalación en edificios y viviendas.